Cantando villancicos en el Asil del Sant CristEl domingo 20 de diciembre después de oír Misa de 9.30 h , nos reunimos en el club Valldaura unas cuantas familias con niños en edad de pre-escolar . Nuestra intención era afinar y conjuntar las voces para cantar unos villancicos a los abuelos del "Asil del Sant Crist". Amaneció un día despejado y muy frió como corresponde a las fechas en las que estamos. Al salir de Misa algunos fueron rápidamente al club, mientras otros esperaban pasando un frio tremendo en la plaza de la Sagrada Familia. Hubo un momento de descoordinación que se superó con un desayuno con coca, magdalenas, donuts y cacaolat en la sala de ordenadores.
Necesitamos muy poco tiempo para darnos cuenta que formábamos un coro excelente: los villancicos salían de nuestras gargantas como si los cantaran los angelitos del cielo. Entramos rápidamente en nuestro papel de cantores y el Sr. Bosch -colaborador del asilo- al ver lo bien que salía, nos dio prisa para emprender la marcha, ya que después de nuestra actuación cantaba un famosísimo coro de la ciudad.
Puntualmente nos presentamos en el asilo, entramos en una sala donde todos los viejecitos estaban esperándonos sentados en sus sillas de ruedas. Entramos en la zona que correspondía al escenario, y Marc Serra nos presentó. Cantamos Campana sobre campana, El 25 de desembre, El rabadà, El noi de la mare, y Noche de paz. Los viejecitos nos miraban agradecidos, contentos por la novedad de un coro lleno de voces infantiles, e incluso cantaron con nosotros. De forma espontánea y sin haberlo preparado las niñas de P4, Maria Palmés y Aina Torbisco recitaron un verso de navidad que hizo las delicias de los abuelitos, monjas y cuidadoras. Como no podía ser menos María Zorita recito otro verso. El ambiente se cortaba de emoción. Nos aplaudieron a rabiar y al finalizar el acto, Marc nos animó a saludarles y a felicitarles la navidad. Más de una viejecita repartió chupa-chups que decía estaban bendecidos.A continuación fuimos a un bosque a buscar musgo para consumo propio que no es delito. Muchas de las familias participan en el “I Concurs de pessebres on line Valldaura” y necesitaban musgo para mejorar sus belenes. Los niños estuvieron recogiendo todo el musgo que quisieron y cuando nos cansamos, nos dirigimos al restaurante Queral de todos conocido por lo bien que sirven.
Allí Josep Tosquella nos preparó una sala grande para nosotros y los niños pudieron jugar y pintar todo lo que quisieron. Mientras los padres comimos con tranquilidad y tuvimos un rato muy animado de tertulia. El plan fue fantástico y nos quedan muchas ganas de repetirlo el año que viene.
Pots veure les totes les fotografies en aquest album.